La vida para los jóvenes alemanes resulta más sencilla que para los españoles. Terminan de estudiar y, simplemente, se ponen a trabajar, lo que les permite construir su futuro. Eso es grosso modo lo que indican las cifras de paro juvenil que en Alemania se sitúan en el 6,5%. El panorama aquí, en España, es distinto. El desempleo juvenil alcanza al 36% y las precarias condiciones de trabajo condicionan a la generación de jóvenes menores de 24 años a aplazar cualquier intento de autonomía personal.
Una de las claves de la estabilidad laboral alemana se sustenta en el sistema de formación de los adolescentes en el que está implicado el tejido empresarial. El buque insignia de este modelo de éxito es la Formación Profesional Dual, que proyecta sus luces y sus sombras, pero que funciona desde hace un siglo en el país con indiscutibles resultados en la ocupación. “El secreto de la formación dual es que combina la teoría y la práctica. Un alumno estudia aquello para lo que va a trabajar y trabaja en aquello que está aprendiendo en la escuela”, explica Clemens Wieland, director de Proyectos de la Fundación Bertelsmann.
La Formación Profesional Dual, a pesar de sus buenos datos, sigue siendo una modalidad poco conocida y extendida en España. Este sistema se basa en aunar la demanda de las empresas con la enseñanza. De esta manera, los alumnos combinan sus estudios en un centro de educación secundaria con las prácticas remuneradas en las empresas. Lo más positivo es que muchas compañías participan activamente en la elaboración de los planes de estudio para aumentar la empleabilidad.
El curso pasado, unos 24.000 fueron los alumnos matriculados en FP Dual, un número pequeño teniendo en cuenta que el total de los inscritos en Formación Profesional fue de 810.621 alumnos. Sin embargo, desde el curso 2012/2013, el número de estudiantes de FP Dual se ha multiplicado por cinco. Actualmente, este tipo de enseñanza se encuentra en 650 centros educativos españoles y más de 10.000 empresas colaboran con este sistema de aprendizaje y formación.
Para la Fundación Bertelsmann, la FP Dual es todo un éxito, ya que ofrece un 10% más de oportunidades de empleo que la FP normal. Juan José Juárez, director de proyectos de la Fundación, va más allá señalando que el 75% de los alumnos que terminan el grado de FP Dual salen con un empleo.
Nuestras escuelas de Formación Profesional están apostando decididamente y de manera creciente por el sistema dual. Junto a la oferta de la Formación Profesional Básica (49 centros están ofreciendo actualmente FP Básica) el gran reto que debemos acometer con decisión es la extensión de la FP Dual. Nuestra tradición apoya todo lo que vaya en beneficio de la ocupación digna de los jóvenes.
Ángel Astorgano. Coordinador Nacional de Escuelas Salesianas